ENTRE LAGOS Y BOSQUES

Amanece un día espléndido en Osorno, no hay que olvidar que estamos en verano, en el verano austral, donde amanece a las 6,30 y anochece a las 10.00 h. Y empezamos a bajar al sur, de momento la etapa de hoy ha sido una espectacular toma de contacto con la brutal naturaleza.

Viendo estos bosques de Robles, Cedros, abedules, Araucarias, con árboles centenarios, de portes y envergaduras gigantes, los parques nacionales se suceden como por encanto, los lagos impresionan de su abundancia. Ríos que surcan todas las depresiones, nieves perpetuas que drenan torrentes todo el año, todo un vergel difícilmente imaginable.

Partimos a las 11, 00 h después de recoger las motos y dejar todo listo, para la cita, la primera parada obligatoria, a tan solo 25 km. De la ciudad de Osorno, en Moncopulli para conocer a D. Bernardo Eggers y su auto museum Moncopulli. Un romántico enamorado de los Studebakers, con una magnifica colección y un interesante museo, compartimos tertulia y pasiones, y nos congratulamos del encuentro.


De ahí partimos a la primera frontera Argentina el paso Cardenal Antonio Samoré para dirigirnos a la Villa Angostura, Antes dejamos atrás el lago Puyehue y su frondoso parque nacional, donde además disfrutamos de las cataratas del salto de la novia y de las cumbres del paso, continuamos hacia la frontera Argentina para tener el primer contacto con las costumbres administrativas fronterizas.

El Lago Nahuel Huapi nos lleva en voladas por su rivera, salpicada de cabañas de madera y grandes chalets y hosterías, paisaje idílico que sin duda se parece más a al norte de Canadá que al Sur del continente. Comenta Sonia que el lago es el más profundo del Sur y que llega a los 500 metros. Sin duda al menos nos acompaño 100 kilómetros hasta San Carlos de Bariloche final de etapa.

Bariloche es una bulliciosa ciudad del interior animada por los pasos fronterizos, cuya catedral es espectacular, un asentamiento comercial y mundano que encuentran en el lago y los largos inviernos dos actividades importantes de subsistencia. Paseamos brevemente en la noche y descubrimos una alegre actividad, donde los restaurantes con carnes a la brasa, las chocolaterías y los comercios parecían no entender de crisis.

Mañana partimos hacia el sur, hacia Esquel, continuamos en Argentina, la etapa será un poco más larga, sobre 360 km. Pero promete el mismo encanto de Hansel y Gretel. Las noticias del volcán no son halagüeña, pues han cerrado el paso fronterizo, por la inmensa lluvia de cenizas que oscurece todo, veremos si podemos pasar, eso se lo contaremos mañana.

Saludos Canarias